miércoles, 15 de marzo de 2017

The Smashing Pumpkins: Mellon Collie and The Infinite Sadness


Disco: Mellon Collie and the Infinite Sadness

A pesar del juego de palabras, se podría traducir como "melancolía e infinita tristeza".

Grupo: The Smashing Pumpkins

Integrantes: Billy Corgan (voz principal, guitarra, piano, arreglos de cuerda, dirección artística y de diseño, mezclas y producción). James Iha (Guitarra, voz en dos canciones, ayuda en composición y producción). D´Arcy Wretzky (bajo, voz en una canción). Jimmy Chamberlin (batería, voz en una canción).

Estilo: grunge, rock alternativo, heavy metal

Duración: 121 minutos

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Si hay algo que no podemos recriminar a Billy Corgan, oscuro líder de quienes machacan calabazas, es que no sepa despedirse. Antes de abandonar las guitarras; y gradualmente a los demás integrantes de su grupo y la excelencia compositiva; nos dejó un disco doble para que lo rechazáramos por soberbio y grandilocuente, amáramos sus éxitos, lo paladeáramos poco a poco con el paso de los años; y finalmente amáramos el sonido de cada minuto, con la sabiduría que sólo otorga el tiempo.

Un álbum ecléctico en dos partes, que ahora, por qué no, repasaremos canción a canción. Grabaron más de cincuenta temas, iban a ser treinta y dos, quedaron veintiocho. ¿Cuál de los dos discos que conforman el doble LP Mellon Collie and The Infinite Sadness es mejor? ¿Dawn to Dusk o Tiwilight to Starlight? La gran pregunta.

Corgan, en su momento, comparó esta ambiciosa obra con la importancia de The Wall, y no iba desencaminado. Pocos grupos más podrían mantener nuestra atención y su originalidad durante más de dos horas, sin irse por las ramas ni renunciar al tono principal, y haciendo honor a una portada como ésta; que asocia un par de cuadros clásicos con un anuncio de cerveza, en pos del homenaje subliminal a la masturbación femenina. El testamento para la historia de un genio en su máximo esplendor, su primavera creativa. ¿Puede haber algo más grande?

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1- DAWN TO DUSK

Mellon Collie and The Infinite Sadness: Puede parecer increíble, pero este primer tema es el que más veces he escuchado. Cuántos compositores de música clásica matarían por que se les ocurriese una pieza a piano como ésta, breve, bella, bellísima. Siempre termina antes de tiempo.

Tonight, Tonight: Lógico que sea single, pues cumple todos los cánones. Redonda y con clímax final. La contraparte vitalista de Disarm. 

Jellybelly: Se acercan a lo lejos las guitarras, con empaque, como un puñetazo en la mandíbula. Y aún nos darán cosas bastante mejores, como veremos a continuación.

Zero: Destrucción, zombies, camisetas negras con estrellas grises. Similar a Bullet with Butterfly Wings pero algo más corta y directa, distorsión y empaque al estilo stoner. Temazo para las radios rockeras por los siglos de los siglos, un solo de guitarra como el brillo del sol reflejándose en una cuchilla de afeitar. Y Corgan como un ser maligno, extraterrestre. Nadie podría hacer algo similar a esto, mejor que ellos. Si no le pongo más nota es porque no contemplo la perfección para un tema siniestro, opresivo, desesperanzador: para mí, la alegría es un valor artístico, que sólo una obra de denuncia podría eludir sin verse perjudicado.

Here Is No Why: Cómo suena este grupo... Voz, guitarras, bajo, batería... Únicos. No se me ocurre mucho más que decir pero la culpa es toda mía, no de esta gran canción de rock. 

Bullet With Butterfly Wings: "The World is a Vampire" y luego ya el resto. Himno de manual (qué fácil parecía hacerlos en los 90). No te importa que acabe porque vas a volver a escucharla. Si eres adolescente y hoy quieres ver al mundo arder (metafóricamente), cambia  mi nota a diez o 9,99999.


Sí, yo también crecí viendo este videoclip en la MTV... y no me importaría comprar esa camiseta.

To Forgive: Quizás se nota más entre dos de los mejores temas, que éste sea de los más flojos, aunque nunca malo. To Forgive es una lamentación que avanza despacio hacia el trallazo de And One To One. A destacar la sección de cuerda y el esmero de la producción.

Fuck You (An One To One): Qué importante es en un grupo la sección rítmica, nunca suficientemente valorada. D´Arcy (bajo) y Chamberlin (batería) hacen aquí una labor brutal para que tanto Iha como Corgan se luzcan como héroes de una juventud extraviada (todas lo son, por definición). La tonada perfecta para hacer planchas y dominadas en el gimnasio. Ha perdido algo de efecto en mí tras cien escuchas.

Love: Un comienzo especialmente distorsionado -pero pegadizo- da lugar a un estribillo que si entonara con Auto- Tune algún cantante conocido, podría ser número uno. Se te queda en la cabeza, y como la canción lo merece, no es algo malo. Alma pop, carácter incómodo y salvaje.

Cupid De Locke: Diferente, espacial, dulce. Suena parecido a la nostalgia, que no es poco.

Galapogos: Canciones como ésta nunca sobran en un disco. Intimista, placentera. Dentro de sus limitaciones, sabe a gloria.

Muzzle: Pegadiza, juguetona, muchos colores.

Porcelina of The Vast Oceans: Si nos decidiéramos a hablar sobre esta canción, tendría que abrir una entrada exclusivamente para ella, maravillosa, grabada en varias partes. 

Take Me Down: Adornada por el cambio de voces, tomando ahora James Iha el mando, es una maravillosa interpretación. Iba para cierre, acaba por convertirse en una obra maestra. La prueba definitiva de que Corgan estaba realmente tocado por la varita.

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2- TWILIGHT TO STARLIGHT

Where Boys Fear to Tread: Contundente pero nunca brillante. El disco comienza con fuerza pero sin demasiada chispa.

Bodies: Ya sólo por la batería y los gritos ensordecedores de Corgan, merece la pena. Es tan potente que luego tocan tres canciones suaves, para recuperar.

Thirty-Three: Demasiado bonita. Gotas cayendo, sentimiento de extrañeza. Desubicados por el mundo. Tristemente "tapada" por los himnos Tonight, Tonight y 1979, siempre pide una escucha más. ¿Vas a mirarle a los ojos y decirle que no? Sin duda, éste es uno de los álbumes mejor editados que habré tenido la suerte de escuchar. Aunque pueda hacerse algo lenta, si te dejas llevar consigue golpearte al doblar la esquina. 

In The Arms of Sleep: Hermana pequeña de otras canciones del álbum, en todo caso la grandiosidad de su estribillo y esa guitarra acústica la salvan de pasar desapercibida.

1979: Su base electrónica la convierte en una premonición de lo que sería posteriormente el grupo. Sólo eso podemos echarle en cara. En cualquier caso, según yo lo veo, en este disco, a diferencia de en Siamese Dream, Corgan alcanzó su cénit en los temas energéticos y salvajes, no en los que buscan la belleza.

Tales of a Scorched Earth: Después de tres temas de corte preciosista, por si alguien se había dormido, vuelve el Corgan más enfurecido, con esta bola de cañón. Asusta un poco, pero luego se te pasa. Orgásmica por momentos (y en general); aunque la voz está tan electrificada que irritará a más de uno. Por cierto, ¿alguien puede echarme un cable? ¿A qué subgénero del metal pertenece esto? Los "Smashing" le daban a todo y siempre les salía bien. Ojo a la guitarra. James Iha y el líder del grupo formaban una dupla temible, de lujo, y qué decir de Chamberlin a la batería. A pesar de que el tema  parece un intento de ser lo más bravos y chirriantes posible, And One To No One es tan buena que no logran transmitir más fuerza que ella.

Thru The Eyes of Ruby: Por si alguien te pregunta alguna vez quiénes son los Smashing Pumpkins. Qué emoción, qué ganas de vivir. Cuando salieron éste y el Siamese Dream, eran uno de los mejores grupos de rock del mundo. Ojo al principio, al final, los embistes y los frenazos. Ser capaces de armar una canción tan larga, que da tantas vueltas, manteniendo siempre la tensión, dice mucho de un grupo. Que las canciones más extensas sean siempre de un nivel tan alto también demuestra que el bueno de Billy, muy lejos de cegarse con su ambición, sabía muy bien lo que hacía. 


En directo, de maravilla.

Stumbleine: Una guitarra acústica y la voz dolida de Corgan al frente de un tema con mucho gancho. Una joya para quienes tienen la paciencia de recorrer el disco azul en su totalidad. Sensibilidad, sentimiento.

X.Y.U.: Vaya panda de bestias. Dejad paso, que se acercan las tropas del apocalipsis (con malas intenciones.)

We Only Come Out at Night: Con ésta se inicia quizás la parte más floja del disco, una sucesión de canciones pequeñas, breves, pero bonitas; lo cual tiene mucho sentido pues a estas alturas otra X.Y.U Zero resultaría ya cansina. Nos acercamos poco a poco al fin de esa tristeza que se presuponía infinita y se nos avisa ya en el estilo de las canciones, que parecen marcar una despedida.

Beautiful: Hace honor a su nombre (pero no mucho más).

Lily (My One And Only): Una canción de despedida de Corgan a su gata que, la verdad, podía habérsela guardado para ella sin que perdiéramos demasiado. Cumple sin más.

By Starlight: Tras el pequeño lapsus, recuperan el nivel con una canción igualmente lenta y pausada pero que siempre da en el grano. Se acerca el final.

Farewell and Goodnight: Los Smashing como los habíamos conocido se despiden, y cantan uno por uno al borde de su tumba, en un tema preciosista que comienza como una dulce balada y culmina de forma circular, volviendo a un piano, notas prístinas dando paso al silencio. Tan bonito como la vida. Y es que resulta que, quizás ya lo habéis escuchado, este cd está considerado como un viaje semi-conceptual sobre el paso de la vida y sus etapas hacia la muerte, de ahí el nombre de las dos partes sean Dawn to Dusk (Del amanecer al anochecer) y Tiwiligt to Starlight (del crepúsculo a la luz de las estrellas. Sin comentarios a que un disco que quiere reflejar la vida humana se llame "melancolía e infinita tristeza".


DISCO 1: DAWN TO DUSK

Mellon Collie and The Infinite Sadness: 9,4
Tonight, Tonight: 8,2
Jellybelly:8
Zero: 9,1
Here Is No Why: 8,3
Bullet With Butterfly Wings: 9,3
To Forgive: 7,8
Fuck You (An One To No One): 9,5
Love: 8,5
Cupid De Locke: 7,9
Galapogos: 8,3
Muzzle: 8,4
Porcelina of the Vast Oceans: 8,9
Take Me Down: 8,1

DISCO DOS: TIWILIGHT TO STARLIGHT

Where Boys Fear To Tread: 7,1
Bodies: 8,5
Thirty-Three: 8,5
In The Arms of Sleep: 7,6
1979: 8,6
Tales of a Scorched Earth: 8,5
Thru the Eyes of Ruby: 9,5
Sumbleine: 9
X.Y.U.: 8,9
We Only Come Out at Night: 7,6
Beautiful: 7,4
Lily (My One and Only): 6,8
By Starlight: 8
Farewell and Goodnight: 9,2

NOTA GLOBAL: 9,2


El todo es mucho más que la suma de las partes. Deberíamos escuchar discos, más que las canciones. Tiene mucho mérito armar un conjunto que mezcle con éxito tantos estilos y enfoques musicales, hasta construir una auténtica "biblia" del rock alternativo. Y, aunque estén a la par en belleza, en cuanto a músculo y variedad supera con creces al Siamese Dream. Cambios de ritmo, gran multitud de instrumentos, estilos en teoría contrapuestos. Un clásico.


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